Cuánta valentía se necesita para coger la oportunidad
Dicen que el tren de las oportunidades solo pasa una vez en la vida.
Pero si vas a cualquier estación o aeropuerto, verás que están llenas de trenes y de aviones, los cuales se dirigen a destinos diferentes.
Los viajeros entran y salen, movidos por sus decisiones. La vida son las decisiones que tomamos, y también ,las que no. Pues decidir no tomar una decisión, es a si mismo una decisión.
Una vez leí en un libro de Paulo Coelho que el gran impedimento de un hombre a a que un sueño se cumpla es su miedo mismo a que este se cumpla, que aquello por lo que seguramente no cumplirá su sueño es su miedo a que este se haga realidad.
A mis trece, catorce años, no supe entender del todo la magnitud de aquella frase que ha ido reverberando en mi a lo largo de los años. Estamos hechos de palabras, de frases que leemos o escuchamos, de historias, de poesía. Hoy, a mis 27 años, después de todo el camino recorrido puedo entender la frase que nunca conseguí olvidar, mucho mejor que en aquel entonces. Como si las frases que subrayásemos en los libros se tatuaran en nuestra memoria y su enseñanza fuese cayendo a cuenta gotas, grano a grano como un reloj de arena.
La vida nos presenta oportunidades, que sin darnos cuenta, la gran mayoría de las veces, nosotros mismos creamos. Nosotros creamos nuestras oportunidades.
No siempre somos víctimas de nuestras circunstancias. Cuando entendemos que podemos ser los pilotos de nuestra vida todo cambia.
El miedo se supera con confianza. Lo contrario de miedo es la confianza.
Hoy, miro a mi alrededor, y me siento orgullosa de las oportunidades que he tenido la valentía de crear, y más aun, de coger al vuelo. Y es que cada paso solo que doy acorta el camino hacia la meta de mis sueños. Tener sueños es lo que nos mantiene vivos, lo que hace nuestra vida interesante.
Qué valiente quien reconoce sus miedos, y qué valiente quien, a pesar de ese miedo, va tras ellos. Quien no se deja amedrentar por ellos, quien, aun escuchar lo que estos tienen que decirles, no siempre actúa movido por ellos.
Valiente es quien confía en la fuerza de sus piernas para correr tras sus sueños.
Hoy confío en que todo esto solo es el principio de algo grande. El primer paso de un bonito camino de crecimiento y mejora. Pues teniendo un espacio para mi, podré expandirme, podré crecer, podré brotar.
Necesitamos nuestro espacio, como los peces necesitan una pecera grande. La naturaleza es tan sabia que el pez crecerá dependiendo del espacio que tenga para ello. Cuanto más grande sea la pecera más crecerá el pez. Lo mismo sucede con las plantas, con los árboles, sus raíces y sus troncos o tallos. Se expandirán y crecerán dependiendo del espacio que tengan para ello. Sé como un árbol. Busca tu espacio, y crece en él.
Hoy, despertándome por primera vez en mi casa nueva, agradezco la valentía de haber dado el paso. La valentía de confiar en mi, y de escogerme a mi misma.
Agradezco la valentía de haberme subido al tren de la oportunidad, la oportunidad que yo misma he creado.
Recuerda, tú eres el piloto de tu vida y el creador de tus oportunidades.
Becca Lago